Duvet es una palabra francesa que significa “abajo”, y no edredón, aunque algunos erróneamente la toman como sinónimo. Posiblemente el duvet y el edredón se parecen, pero no son lo mismo. Los dos son cubrecamas; sin embargo, cada uno tiene sus características y su uso. Claro está que puedes preferir uno que otro, pero también puedes tener los dos y elegir cuándo utilizarlos.
Duvet
¿Y el Duvet, qué es? Al duvet también se le conoce como plumón, y se ha convertido en una de las grandes tendencias para cubrir la cama. Consta de dos partes: la cubierta removible y un forro con relleno. El relleno o inserto puede ser sintético o de plumas. La cubierta se llama funda de duvet, que es la que protege al relleno y es removible. Puede tener un traslape o cierre para mantener al inserto o relleno seguro y que también pueda ser fácilmente removida, lo que hace que la tarea de lavado sea mucho más sencilla.
Tipos de duvet
Vas a encontrar tres tipos de duvet, la diferencia radica en el tipo de relleno:
- Duvet de fibra natural: Está relleno de plumas de pato, oca o ganso, lana, seda o algodón. Debido a este relleno se considera de lujo. Es el duvet más suave y ligero que vas a encontrar, además de proporcionar más calor y tener una vida útil de hasta 20 años.
- También hay un duvet relleno 100% de fibras de bambú. Esto lo hace suave, ligero y transpirable. No guarda malos olores y tiene propiedades termorreguladoras, lo que permite que mantengas una temperatura corporal ideal mientras duermes. Además, al igual que el relleno de algodón, es libre de crueldad hacia los animales.
- Duvet sintético: Está relleno de fibra sintética o microfibra, este es más recomendable para aquellas personas que presentan alergias a las plumas. Claro que este material guarda menos calor y es menos confortable, su vida útil es de 10 años.
- Duvet mixto: Hay una funda duvet mixta que está elaborada de una mezcla de fibras, 50% bambú y 50% microfibra, lo que lo hace increíblemente resistente, fresco y absorbente. Además, no irrita la piel y no genera alergias.
Puntos a favor del duvet
- Con solo intercambiar la funda ya tienes varios modelos diferentes.
- Tiene un diseño limpio, simple y ligero.
- Es muy fácil de lavar.
Edredón
El edredón es un tipo de cubrecama grueso, de acolchado capitonado al que asegura su relleno de fibra sintética. Un edredón es una sola pieza y está cosido, es decir, no se puede separar la parte exterior del interior, la cual brinda calor y lo hace más cómodo a la hora de dormir. Como está conformado por una sola pieza, su limpieza debe ser completa.
Tipos de Edredón
Hay tres tipos de Edredón, y como en el duvet, la diferencia radica en el tipo de relleno.
- Edredón de fibra natural: Aunque la mayoría de edredones que vas a encontrar son sintéticos, sí existen naturales. Por ejemplo, hay un edredón de seda con una cubierta 100% de bambú.
- Edredón sintético: Es el más común y está relleno de fibra sintética o microfibra; es el más recomendable para aquellos con alergias a materiales naturales.
- Edredón mixto: Puedes encontrar edredones que están elaborados de ambos materiales, sintéticos y naturales, por ejemplo, uno que esté relleno de microfibra, pero con una cubierta de mezcla de fibras de bambú.
Puntos a favor del edredón
- Es acolchado y grueso lo que garantiza no pasar frío, a diferencia del duvet, que no está hecho para las temporadas de verdadero frío.
- Al estar capitonado, su relleno es parejo y no se hace bolas.
- Lo mandas a lavar a tintorería y te quitas de problemas.
Alergias y cuidados
Generalmente las alergias surgen como resultado del polvo y suciedad que puede guardar una colcha, un duvet o un edredón, y a veces no como consecuencia del relleno en sí; claro, hay excepciones con casos de alergias a determinados materiales.
También hay que tomar en cuenta que no es necesario que seas alérgico a las aves para que puedas sufrir de alergias a un duvet de plumas. Las alergias al polvo y a los ácaros que crecen en nuestra ropa de cama son muchas veces la causa de los problemas respiratorios más comunes.
Los rellenos de microfibra o de bambú son una excelente alternativa para evitar este problema, ya que son suaves, abrigan bien y se pueden lavar frecuentemente. Es recomendable que revises que la fibra de la que estén rellenos, duvet o edredón, sea hipoalergénica, resistente a los ácaros del polvo, y que se pueda lavar a 60 °C, la temperatura que mata a estos bichos.
Qué colores elegir
El duvet es de origen nórdico, por lo regular es de tela blanca, lisa o estampada, porque finalmente está diseñado para cubrirse con una funda que sí tiene mucha más variedad en colores y estampados; y con el edredón no tienes esta posibilidad. Pero independientemente de lo que elijas, te recomendamos seguir algunas indicaciones del feng shui para tu dormitorio y los colores a escoger.
Debes encontrar la armonía entre el tono de tus muros y el que utilizarás en la ropa de cama y otros textiles (alfombras, cortinas, cojines, etc.).
En cuanto a los colores del edredón o duvet, éstos deben ser suaves, como los tonos tierra (beige, color hueso, etc.), verdes, malva, rosa palo o gris, el color más representativo de los neutros. Dos opciones de combinaciones son las siguientes:
Tonos tierra y blanco
- Puedes pintar la pared de la cabecera en tonos tierra y de blanco el resto de los muros.
- Usa una cabecera de madera natural cálida y ropa de cama en blanco, tanto para los cojines como para el duvet o edredón.
- A los pies de la cama pon un tapete en tonos marrones para aportar calidez y un visillo del mismo tono que deje pasar la luz.
Colores neutros
- Los colores neutros por excelencia son el gris y el hueso. De hecho, este último es quizás el más utilizando en feng shui, ya que transmite buenas vibraciones, es elegante, cálido y luminoso, además de que, al estar a medio camino entre el blanco y el amarillo, se convierte en la base perfecta para combinar con todos los colores, como el azul (color representativo de la meditación). Así que los duvets o edredones de estos colores son tan versátiles, que se convierten en la opción ideal para combinar con casi todo tipo de decoración.
- Finalmente, evita los estampados recargados y no utilices muchos tipos de texturas. De este modo favorecerás el descanso.